3 consejos útiles para cuidar tu máquina de espresso
Las cafeteras espresso son parte del estilo de vida de las personas. Son ideales para disfrutar de los mejores cafés en la casa o en la oficina, por lo que mantenerlas limpias y en óptimo estado es clave para seguir complaciendo nuestro paladar con tazas exquisitas llenas de sabor y aroma.
A continuación te presentamos 3 consejos sencillos para el mantenimiento de una máquina de espresso, con el fin de alargar su vida útil y garantizar resultados perfectos en las bebidas.
1. Limpia el circuito de leche
A este punto se le tiene que prestar especial atención para cuidar con éxito la cafetera espresso. El circuito y el depósito de leche necesitan limpieza diaria para evitar que el lácteo se seque, pues es muy difícil de extraer.
Muchas máquinas cuentan con un modo de limpieza rápida, el cual se recomienda activar después de cada bebida preparada con leche. También se requiere enjuagar diario el tubo y la parte superior del recipiente para leche con agua tibia, mientras que las piezas pueden desmontarse fácilmente para lavarlas por separado y a profundidad con jabón cada semana. Además, el espumador se debe asear con agua y jabón.
2. Descalcifica la cafetera de manera regular
El agua contiene importantes niveles de calcio y magnesio. Cuando el agua se calienta, estos elementos se descomponen y forman cal en los circuitos internos de la cafetera.
Sonidos bruscos al preparar las bebidas, fallos en la temperatura, obstrucción de los componentes internos y mal sabor del café son las señales más comunes que indican que la máquina necesita una descalcificación.
Los intervalos para descalcificar una cafetera dependen principalmente del nivel de sales de calcio y magnesio disueltos en el agua; es decir, de la dureza del agua y de la cantidad de cafés preparados diariamente.
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La máquina de espresso suele indicar cuando necesita este servicio, pero por lo general se realiza cada tres meses para mejorar el funcionamiento y asegurar su eficiencia.
Existen en el mercado líquidos específicos para retirar el calcio de la cafetera; se desaconseja emplear vinagre, el cual contiene ácido acético y puede estropear algunos depósitos, además de añadir un olor desagradable.
Para reducir las incrustaciones de cal en los elementos del interior de la cafetera y conservar el sabor del café es importante utilizar un filtro descalcificador de agua. Éste se debe cambiar cada dos meses.
3. Asea el grupo infusor
El infusor garantiza la distribución del calor y la presión adecuada para preparar el café. Esta pieza es extraíble y se debe limpiar por lo menos una vez al mes para evitar que los lípidos de café tostado en combinación con el oxígeno deterioren la calidad de sabor y aroma en taza.
Hay otras piezas cuya limpieza regular es necesaria, como las superficies, bandeja de goteo, rejilla, cajón de fondo, boquillas de salida de café y los depósitos de granos de café y de agua. Con estos cuidados, la cafetera espresso estará en óptimas condiciones.
