Mujeres reviven el café en Puebla
De la mano de las mujeres renació el café en la Sierra Norte de Puebla. Apoyadas por la Alianza de Mujeres en Café México reactivaron los cultivos que parecían destinados a la extinción debido a la producción mínima, a los bajos precios del grano y a las plagas.
En esos campos con cafetales secos las poblanas llegaron a generar vida. Luego de que sus esposos emigraron en la búsqueda de mejores ingresos para solventar sus necesidades, son ellas quienes cultivan el café.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), las mujeres representan 43 por ciento de la fuerza laboral agrícola en los países en desarrollo, pero tienen menor acceso a la tierra, el crédito, la capacitación y la información. A la par se dedican a las labores del hogar y el cuidado de sus hijos.
La Alianza de Mujeres en Café es una organización internacional que llegó a México hace tres años para empoderar a las mujeres en el campo y reconocer su trabajo. En el país hay más de 750 mil mujeres productoras, principalmente de café, y la alianza busca que su papel se haga visible, no únicamente como jornaleras, sino como productoras y en la toma de decisiones.
Uno de sus casos de éxito es el trabajo realizado en 10 municipios de la Sierra Norte de Puebla: Pahuatlán, Tlaxco, Naupan, Tlaola, Chiconcuautla, Jalpan, Pantepec, Naupan, Huachinango y Tlacuilotepec. En todo ellos se habla otomí, náhuatl y totonaca.
El proyecto está encabezado por Beatriz Hernández Escárcega y dentro de los pilares destaca la vinculación con las instituciones de gobierno. Hace tres años agremiaron a 765 mujeres y sembraron mil 300 plantas de café.
También dieron talleres de capacitación a las caficultoras, las cuales recibieron insumos, equipamiento y apoyo para infraestructura con el fin de tener mejores prácticas agrícolas, siempre en sintonía con la preservación del medio ambiente.
Se les entregó un certificado con validez oficial, lo que impactó en su autoestima y les permitió cobrar un precio más alto por el café que producen al tener éste los más altos estándares de calidad.
La Alianza de Mujeres en Café México promovió, además, propuestas a nivel legislativo para que se tome en cuenta a las productoras. Con estas acciones sembró nuevas esperanzas de desarrollo de las mujeres poblanas, con el propósito de que nunca más haya una caficultura en la que no se les reconozca y retribuya de manera equitativa su trabajo.
(Fotos cortesía de Beatriz Hernández)