Conoce qué es y cómo funciona el sifón de balanza
El sifón de balanza es una cafetera que combina la física y una elegante estética retro para crear tazas limpias, dulces, aromáticas y con cuerpo.
Funciona bajo el mismo principio del sifón japonés que luce el diseño del “globo francés” creado por Madame Vassieux’s en 1841, pero con una característica única: apaga su propia llama.
Conocido también como sifón belga o balancín belga, fue creado a mediados del siglo XIX luego de varias modificaciones a los sifones europeos.
Está formado por dos cámaras ubicadas una al lado de la otra y tiene un quemador de aceite con una tapa con resorte.
El café molido se coloca en la cámara de vidrio y el agua en la cámara de metal, la cual recibe el calor. Este recipiente de metal está fijado a un brazo con peso que funciona como balanza.
El agua contenida en la cámara que está en contacto con el fuego comienza a hervir y se escapa a través de un tubo delgado hacia la cámara de vidrio en la que se depositó el café molido.
El café y el agua se mezclan en la cámara de vidrio. Cuando toda el agua ha sido transferida a la cámara de metal se mezcla con el café. La cámara de metal, que ya no contiene agua, se hace más liviana, se eleva contra su contrapeso y deja de sostener la tapa del mechero para taparlo y apagar el fuego.
Al ya no recibir calor, la bebida ya preparada en la cámara de vidrio regresa a la cámara de metal, la cual obtiene mayor peso y vuelve a descender.
El recipiente de metal cuenta con una llave por donde sale el café directo a la taza para disfrutarlo.
Café de Etiopía, ideal para el sifón de balanza
Se recomienda usar un café de origen, como el de Etiopía, con tueste medio, cuerpo intenso y matices que recuerden a moras, chocolate, manzana y cítricos. La molienda aconsejada es medio-fina.
La elaboración del café lleva más tiempo en un sifón belga, pero es un deleite participar de esta vistosa preparación en una cafetera con aires antiguos.