Pulpa del grano de café. ¿Qué es y para qué sirve?
El proceso de beneficiado del café arroja subproductos que antes eran considerados desperdicios y que ahora reciben un uso alternativo. Uno de ellos es la pulpa o cáscara, conformada por la parte externa del fruto (pericarpio) y la mayor parte del mucílago (mesocarpio).
La pulpa constituye cerca del 40% del peso de la cereza del café y es separada del grano durante la primera etapa del beneficio a través de las despulpadoras. Es rica en nutrientes como azúcares, proteínas, fibra, nitrógeno, fósforo, potasio y calcio. También contiene cafeína, aunque en una proporción mucho más pequeña que el café en grano.
La cáscara se usa por lo general para elaborar infusiones o como composta. Estas prácticas se han vuelto tendencia debido a que los productores hacen que sus cultivos sean más eficientes y amigables con el medio ambiente, al generar menos desperdicios que iban a parar a los ríos provocando contaminación. Al mismo tiempo, la venta de la cáscara se convierte en una nueva fuente de ingresos.
Té de pulpa (cáscara) de café
En países como Yemen, Sumatra, Etiopía, Jamaica y Sudán las infusiones con cáscara de café se han consumido durante siglos de manera habitual. En Yemen, por ejemplo, una de las preparaciones más populares es el Quishr, hecho con la pulpa de la fruta del café (cáscara), la cual se seca y se mezcla con especias como cardamomo y jengibre para usar como infusión.
El té de cáscara de café presenta un perfil dulce, con notas afrutadas como de ciruela y tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Para elaborar la bebida se deben infusionar unos 5 gramos de cereza en 150 mililitros de agua caliente durante tres minutos. Puede consumirse fría o caliente.
Abono o composta
La pulpa también se puede utilizar como abono. Cuando las cáscaras de café se disponen adecuadamente en fosas, al cabo de 4 a 6 meses se logra obtener un abono orgánico de buena calidad.
En algunos casos los caficultores incorporan lombriz roja californiana en las fosas y así logran obtener humus de lombriz, un abono de mejor calidad. Los costos que representan el manejo de la pulpa con lombricultura significan un ahorro en la medida que se aprovecha este subproducto del cultivo como fuente de materia orgánica.